in

¿A qué edad es el primer apareamiento de los gatos?

Existen muchos factores que condicionan a la aparición del deseo sexual del gato y de la gata: la raza, el peso, la salud, la presencia de otros gatos dentro de su territorio, la alimentación, etc.

Pero en general se dice que la maduración sexual del gato es muy temprana: el celo de la gata suele aparecer entre los 5-12 meses de edad y el gato macho suele tardar un poquito más en despertar sus instintos sexuales.

Como norma general, el primer celo llega entre los seis y los nueve meses. Está comprobado que hay razas más precoces, generalmente las de pelo corto, y otras más tardías, las de pelo largo como la persa, aunque por supuesto hay excepciones.

Lo que está claro es que las condiciones climatológicas son determinantes a la hora de adelantar o retrasar la madurez sexual de las gatas. A más calor, mayor probabilidad de adelanto del celo.

Una gata doméstica puede tener más celos que una salvaje a causa de las propias condiciones de la casa (luz artificial, calefacción…).

Síntomas de una gata en celo:

Los síntomas del celo de la gata hembra pueden ser: tener menos apetito, estar inquieta moviéndose de un sitio a otro, maullar para atraer a los gatos, y frotarse contra cosas o personas para ir dejando su marca.

Hay momentos álgidos en el celo de la gata, normalmente al tercer día, en los que acentúa más estos síntomas y se arquea cuando le acaricias la parte trasera, se lame patas y genitales, etc.

La gata en celo que no se aparea durante un largo tiempo puede llegar a tener trastornos hormonales, un celo permanente o un falso embarazo.

Por su parte, los machos también inician sus escarceos amorosos cuando llegan a su etapa adulta. En torno a los 8 meses, un gato está ya preparado para su primer apareamiento. Hay que tener en cuenta que el celo de los machos depende principalmente del de la hembra, es decir, que su instinto sexual se active, depende en gran medida de que una gata cercana esté en celo.

Síntomas de un gato macho en celo

 Los síntomas que suele presentar un gato macho en celo son básicamente: dejar muestras de pipí por la casa (el “pipí sexual” del gato tiene un fuerte olor que no es fácil de eliminar por mucho que limpies), maullar casi a gritos, lamerse genitales, restregarse contra objetos y personas, moverse de un lugar a otro…

El gato va dejando marcas de su deseo sexual en busca de que la hembra lo sienta, marca el territorio. Cuando el gato macho detecta que hay una gata “dispuesta” cerca, es capaz de todo por conseguirla, lo que conlleva peleas entre gatos macho.

 Si el gato macho doméstico no tiene cerca a una gata en celo, puede intentar salir de la casa en busca de una hembra, con los peligros que eso conlleva.

Si se trata de cruzar de manera premeditada a dos gatos, la edad ideal para ese primer apareamiento es al año, cuando los dos animales ya son adultos y han llegado a su madurez sexual, pero, por supuesto, el primer encuentro sexual puede producirse antes, incluso a los 5 meses, todo depende del entorno, el clima y el desarrollo de cada animal.

Deja un comentario

GIPHY App Key not set. Please check settings