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Gatita callejera embarazada no podía caminar, y se recupera por amor a sus gatitos.

Una gata sin hogar embarazada de color naranja estaba vagando por las calles de Mansfield, Texas, pidiendo ayuda de manera desesperada ya que no podía caminar y se arrastraba para movilizarse a un lugar seguro.

Susan Edstrom, fundadora del centro de rescate de animales Four Paws One Heart, ubicado en Trophy Club, Texas, se enteró de la gatita y decidió ayudarla. Sin pensarlo dos veces, recogieron a la gatita necesitada y la llevaron a varios veterinarios para realizarle diferentes exámenes y radiografías, para conocer su estado de salud.

Susan comentó a Love Meow:

«La gata tiene una voluntad muy fuerte de vivir… Se determinó que una (bolita) estaba (alojada) en el área T9 de la columna. El consenso fue dejarla allí para evitar daños mayores. Tenía sensación en las patas cuando se las tocaban».

Además de eso, notaron algo aún más sorprendente, una radiografía reveló que la gata estaba embarazada. La gatita llamada Chelsea fue trasladada a un hogar de acogida para su recuperación, y durante las próximas semanas demostró ser muy fuerte y resistente.

Chelsea movía sus patitas tratando de usarlas y todos los días se arrastraba para ejercitarse, mientras su cuidador le hacía terapias en sus patitas traseras.

Susan agregó:

«Compramos una caja de arena para gatos mayores y ella intentaba usarla. Finalmente vimos videos de ella levantándose, tambaleándose y cayendo, pero era perseverante».

Un día, la insistente gatita se levantó en sus cuatro patitas y empezó a dar sus primeros pasos, aunque caminaba lentamente, pero segura.

Luego de unos días usó la caja de arena y aprovechó sus pequeños movimientos para rascarse la parte superior de las orejas con sus patas traseras. El día 31 de marzo, para sorpresa de muchos, Chelsea dio a luz a cinco hermosos bebés sanos en la comodidad de su nuevo hogar.

Todo parecía indicar que la gata estaba preparada para este momento y estaba lista para cuidar a sus exigentes gatitos recién nacidos.

Chelsea demostró ser una madre única, maravillosa y dedicada; atendía todas las peticiones y necesidades de sus bebés, además, los supervisaba constantemente mientras crecían satisfactoriamente.

Pronto, todos sus gatitos estuvieron listos para ser adoptados y rápidamente encontraron un hogar para siempre, menos uno de ellos, el adorable Georgie Boy, quien es una pequeña versión de Chelsea, aunque con diferentes personalidades, pero ambos continuaban esperando un hogar definitivo y, mientras tanto, se hacían compañía.

Al parecer, la compañía de Georgie Boy era lo que tanto necesitaba Chelsea desde el comienzo, ya que era una gata muy tímida y desconfiada. Pero gracias a su pequeño gatito que adora a los humanos, poco a poco Chelsea confió en las personas y se acercó a ellos.

La energía y confianza del pequeño Georgie Boy se trasmitió a su madre y ella comenzó a jugar y a demostrar su verdadero gato interior.

Susan agregó:

«Son compañeros constantes y a menudo lo encuentras durmiendo acurrucado con su brazo sobre ella, como su protector».

Han creado un adorable vínculo de madre e hijo, por lo que los miembros del centro de rescate creen que lo mejor es que sean adoptados juntos.

Chelsea está mejorando sus movimientos, está empezando a mover su parte trasera antes de saltar, lo que le facilita jugar como cualquier gato. También aprendió a usar el árbol para gatos, aunque lo hace a su ritmo, pero definitivamente sus pasos de bebé evidencian un gran avance.

La encantadora gata ha recorrido un largo camino en su vida, desde no poder caminar hasta criar a cinco hermosos bebés, realmente es una luchadora.

Susan agregó:

«Ella merece tener siempre una cama suave y un ser humano que la ame».

Chelsea seguirá en su hogar de acogida hasta que una familia de buen corazón decida adoptarla junto a su pequeño, ya que están destinados a estar juntos.

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