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La inteligencia de nuestras mascotas nunca dejan de sorprendernos, y es que realmente ellos son animales que saben muy bien como conseguir lo que quieren.
Y la historia de Jean Ralphio y Mona Lisa, dos hermanos gatunos así lo demuestra. Gabrielle McLemore y su esposo conocieron al pequeño Jean cuando caminaban por la SPCA de Pensilvania, aunque no tenían planes de adoptar decidieron entrar y conocer al pequeño gatito.
Después de pasar un tiempo con Jean se enamoraron de él y a pesar de que tenían otros gatos en casa supieron que él volvería a casa con ellos. Pero descubrieron que este pequeño felino tenía una hermana, Mona Lisa, y la pareja decidió que no podían separarlos y la adoptaron también.
Luego de un año de la doble adopción sus padres humanos están muy agradecidos de tenerlos a ambos.
Jean Ralphio y Mona Lisa son muy juguetones y cariñosos. Se turnan para acicalarse unos a otros y frecuentemente están acurrucados durmiendo. Nunca están lejos el uno del otro
Hace poco, Jean se fracturó la cadera y tuvo que ser operado. Sus dueños lo pusieron en cuarentena en la ducha del baño para asegurarse de que no se volviera a lesionar, pero Mona Lisa no estuvo conforme con eso y empezó a extrañar a su hermano.
Cuando están separados, ella maúlla a través de la puerta e intenta entrar. Ella ha manifestado que necesita más de nuestros abrazos desde que la separamos de Jean
Esta linda gatita sorprendió a sus padres cuando de repente ellos vieron pasar a Jean cojeando por las escaleras. Sin saber cómo había escapado, lo volvieron a meter en la ducha y controlaron la puerta del baño.
Pero no pasó mucho tiempo para que se dieran cuenta de que Mona Lisa había descubierto de alguna manera cómo abrir la puerta del baño y la puerta de la ducha para poder llegar hasta su hermano.
Sabíamos que ella intentaría saber si las puertas estaban cerradas con pestillo, pero no pensamos que fuera más allá. El hecho de que pudiera abrir la puerta corrediza de la ducha fue sorprendente, especialmente que fuera capaz de abrir ambas puertas
Mona Lisa solo quería estar con su pequeño hermano y decidió que haría cualquier cosa para que eso sucediera.
Durante ese tiempo Mona Lisa se come la comida de su hermano y usa su caja de arena, pero también se queda para pasar tiempo acicalándose mutuamente. Fue muy dulce ver que Jean se animó un poco. Creo que ha sentido angustia por estar lejos de ella
Gabrielle permitió que ambos pasaran tiempo juntos, pero ella se quedaba con ellos para supervisarlos.
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