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La pequeña perrita que tristemente nació sin ojos y que solo pesaba apenas 500 gramos, fue dejada en un refugio de animales por su propio criador. Al parecer, el hombre había tratado de crear al perrito “tacita de té” más pequeño que la gente pudiera encontrar, pero todo se salió de control.
La perrita a la que llamaron ‘Teacup’, es un cruce de schnauzer miniatura y un wheaten terrier. Ella no solo nació ciega, sino también con la vejiga unida al útero. Debido a que su criador no podía alimentarla de forma adecuada, puso en riesgo su vida, por lo que la entregó a The Big Fluffy Dog Rescue en Nashville, Tennessee.
La perrita había sido tan sobre criada que no sabía mamar, lo que significaba que no podía beber con facilidad de un biberón.
Afortunadamente, Nicole Butler, coordinadora de adopción y crianza del centro de rescate, se hizo cargo de la perrita y la cuidó.
Nicole dijo:
«No podía creer lo pequeña que era y estaba tan ansiosa por darle algo de comida. Teacup no tiene ningún dolor y no sabe que está discapacitada, ya que nunca ha conocido la vida con visión».
La mujer se encargará de la amable perrita hasta que se recupere completamente y pueda encontrar un hogar adecuado que comprenda sus necesidades. A pesar de sus problemas de salud, Teacup tiene una actitud increíble frente a la vida y está dispuesta a superar todos los problemas.
Nicole agregó:
«Nadie le dijo que es especial, así que vive como cualquier otro cachorro feliz, excepto que se topa con cosas de vez en cuando, pero luego sigue explorando».
Teacup llegó cuando solo tenía 1 mes de nacida, y todo indicaba que no estaba recibiendo suficiente comida por la forma en que la alimentaban. Pese a que sus criadores la trataban “bien”, no estaban entrenados para cuando las cosas salieran mal, por suerte la dejaron en buenas manos.
Cabe resaltar que no todos los animales que son criados para la venta corren con la misma suerte, por eso se recomienda adoptar.
Nicole tuvo que ayudarla con todos sus problemas de salud, era tan pequeña que incluso tenían que mantenerla caliente para protegerla del frío.
Además, la piel que está alrededor de su cuenca vacía también tenía que ser muy cuidada para evitar una posible infección en esta área.
Cuidar de Teacup era una tarea complicada, pero Nicole estaba dispuesta a darlo todo para que la pequeña perrita pudiera recuperarse completamente. Lo primero que hizo fue alimentarla con una fórmula de leche de cabra mediante una jeringa y lograr que recuperara sus fuerzas.
Gracias a su dedicación y a todo el amor que le brindó, la amorosa Teacup ahora tiene 18 semanas y pesa más de 2.2 Kg. Ella disfruta de su vida al lado de su familia temporal, pero esperan que pronto llegue la persona adecuada para adoptarla, teniendo en cuenta sus recomendaciones.
Debido a su tamaño, su nuevo hogar no debe tener perros grandes, debe ser un lugar abierto y que facilite su movilidad por su problema de visión.
Mientras ese día llega, la perrita seguirá bajó el cuidado de Nicole, pero ella y sus compañeros del refugio, quieren advertir sobre comprar perros.
Por lo general, los perritos que son criados para la venta resultan con diferentes problemas de salud debido a su reproducción, así que muchos mueren. Sin embargo, las personas siguen apoyando este tipo de comercio, lo que genera que los criadores sigan utilizando animales para la cría.
Nicole finalmente agregó:
«Los perros enanos a veces pueden tener sus propios problemas, por lo que combinar dos de ellos me parece muy contrario a la intuición, pero las razas de juguete hacen al público en general embelesarse y estoy segura de que traen mucho dinero».
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